Para construir una sociedad más justa y equitativa es fundamental tener en cuenta la inclusión social de las personas dentro del espectro autista ya que aún enfrentan barreras en educación, empleo y acceso a servicios.
Durante las últimas décadas, el concepto de neurodiversidad ha sido protagonista en la forma de reconocer que las diferencias neurológicas, como el autismo, son variaciones naturales que tiene el cerebro humano. Sin embargo, por la falta de información y desconocimiento del tema, los prejuicios persisten, llevando a la exclusión, discriminación y falta de oportunidades para miles de personas que hoy padecen de esta condición. Según la OMS, menos del 50% de los países cuentan con políticas que apoyen a las personas con autismo, lo que refleja una brecha global en materia de derechos humanos.
En nuestro país, se estimada que 1 de cada 115 niños tiene autismo, lo que representa el 1% de la población infantil de México y aunque se ha avanzado en legislación y concientización, aún se enfrentan grandes retos. Muchas familias carecen de acceso a diagnósticos tempranos, terapias especializadas y educación inclusiva. Además, el estigma social continúa siendo un obstáculo, donde existen innumerables mitos como que el autismo es una enfermedad o que las personas con esta condición no pueden llevar una vida normal.
Por esta razón, es necesario romper barreras, las cuales requieren, no sólo de políticas públicas efectivas, sino también un cambio de cultura que valore la diversidad cognitiva, donde se informe y se inspire a la acción. Desde entender qué es el autismo, hasta conocer programas de inclusión en México, fomentando la empatía y el compromiso social.
¿Qué es el Autismo?
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una condición del neurodesarrollo y se señala como “espectro” porque abarca una amplia variedad de manifestaciones que se caracterizan por afectar la comunicación, la interacción social y el comportamiento. Otras características que presentan son patrones atípicos de comportamiento, por ejemplo, dificultad para cambiar de actividad o gran atención en los detalles.
Características principales del TEA:
- Dificultad para comunicarse: Algunas personas con esta condición pueden tener un lenguaje limitado, mientras que otras pueden hablar fluidamente, pero con diferencia en el tono o la interpretación de metáforas.
- Intereses restringidos y repetitivos: Las personas pueden enfocarse intensamente en temas específicos y seguir rutinas estrictas.
- Sensibilidad sensorial: Estas personas tienen hipersensibilidad a los sonidos, luces, texturas, sabores y olores.
El autismo no es una enfermedad, es una condición que permite procesar la información y relacionarse con el entorno de otra manera.
Programas de Inclusión en México
En México, no existe un censo oficial, pero se estima que 1 de cada 115 niños está dentro del espectro autista, es decir, que cerca de 400,00 menores de edad padecen este trastorno. Sin embargo, muchos casos no están diagnosticados debido a la falta de información.
Aunque falta mucho camino por recorrer en este aspecto, en México se ha implementado acciones abarcan desde políticas públicas, hasta programas específicos desarrollados por organizaciones no gubernamentales.
Hacia una sociedad más inclusiva.
La inclusión de las personas con autismo no es solo responsabilidad de sus familias, sino de toda la sociedad. Se necesitan más políticas públicas, mayor capacitación en escuelas y empresas, y, sobre todo, eliminar prejuicios. Cuando entendemos el autismo, podemos construir un mundo donde todos tengan oportunidades.
¿Cómo Puedes Contribuir?
- Infórmate y comparte información verídica.
- Apoya a organizaciones que trabajan por el autismo.
- Fomenta la inclusión en tu comunidad, escuela o trabajo.
La neurodiversidad enriquece a la humanidad, y solo con empatía y acción lograremos un verdadero cambio.